Lache recoge en forma de tiras autobiográficas las anécdotas y vivencias de una educadora social durante sus años de trabajo en un barrio excluido y maltratado. En primera persona y a modo de cuaderno de campo, la autora narra en tono de humor su evolución profesional y personal, la adaptación a la dureza del entorno y su creciente admiración por los vecinos, a través de sus historias de vida y, en especial, de su amistad con Paqui, protagonista última de la historia.
Tras darse de bruces contra lo peor del sistema y al echar la vista atrás, Lache nos invita a preguntarnos dónde se halla la verdadera violencia y qué responsabilidad tenemos en perpetuar tanta discriminación y pobreza.